Una boda conlleva mucho esfuerzo, mucho tiempo y muchas decisiones. Sobretodo decisiones. Pues bien, algo que teníamos claro desde el principio era que el proveedor más importante sería el fotógrafo/vídeo. Por ello, nos reunimos con más de 10 profesionales, todos ellos buenos, pero no llegaban a ser exactamente lo que buscamos. Esto cambió el día que conocimos al equipo Onsurbe. Desde el primer momento notas la profesionalidad y el gran interés por darte la mayor calidad posible en algo que tendrás siempre contigo.
Son pacientes, resolutivos y se amoldan a todo lo que necesitas. Saben captar la esencia qué pides y diferenciarse de los posados típicos que no reflejan lo que realmente fue el día de tu boda. Te ayudan y siempre buscan lo mejor para ti. El día de la boda están más pendientes de ti casi que los dueños del sitio de la celebración, sabiendo cómo no robarte tiempo con los invitados. Te hacen sentir cómodo, pero sobretodo disfrutar, reírte y sacar la mejor sonrisa.
Son de lo más detallistas, asegurándose porque cada invitado pueda ver las fotos, sin necesidad de llevar un pendrive. El día de la boda les dejan en cada asiento una tarjetita personalizada, indicándoles así cómo acceder a ellas desde su casa. (¡No se nos hubiese ocurrido a nosotros, ni queriendo!). Absolutamente todo su equipo es excepcional y aunque ya lo sepas, no te llegas a dar cuenta de ello hasta que ves sus resultados. Simplemente nos dejaron sin palabras. Sobrepasaron en todos los niveles la calidad que nos habían prometido.
A día de hoy si echamos la vista atrás, son los únicos proveedores a los que no les pondríamos ningún pero, sino todo lo contrario. Por todo ello, os recomiendo que si buscáis a un profesional que trate esta función con la importancia que conlleva, no os lo penséis, no hay nadie mejor. Alberto, Miguel, equipo, os agradecemos enormemente vuestro trabajo y cómo habéis conseguido que un día tan importante para nosotros haya quedado tan tan bien reflejado.